Hoy, 30 de Noviembre, es el Día Internacional de la lucha contra los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA), y aunque es un ámbito en el que no estoy especializada, quisiera dar algo de visibilidad y aportar una recomendación que llevo muchos años aplicando: «la regla de los 5 segundos».
¿En qué consiste la «regla de los 5 segundos»?
La «regla de los cinco segundos» nos indica cuándo es adecuado hacer un comentario sobre la apariencia de otra persona. En sencillo: si lo que quieres comentar es algo que no se puede resolver en cinco segundos, ahórrate el comentario. Por ejemplo: en referencia al peso, acné, ojeras… Si se trata de algo que se puede resolver en cinco segundos, menciónalo educadamente. Por ejemplo: tener comida entre los dientes, llevar abierto un botón, que se vea un moco…
¿Por qué aplicarla?
Además de por educación, porque aunque esa persona pueda parecerte muy segura, alegre o hasta presumida, no conoces cómo es su autoestima realmente ni cuál es su relación actual con su cuerpo. Al hacer comentarios (positivos o negativos) sobre el físico de otra persona, podemos estar influyendo en su autoestima y reforzando pensamientos y/o comportamientos compensatorios propios de un Trastorno de Conducta Alimentaria.
Puede que tu comentario te parezca inofensivo, pero no conoces el efecto que puede tener en esa persona. Puede estar pensando en ello durante horas o días, establecer conductas compensatorias (dieta, ejercicio excesivo, saltarse comidas, vomitar…), reconfirmar sus pensamientos negativos («Me han dicho que estoy más rellenita, eso es que estoy muy gorda, doy asco»)…
¡Y en el caso de los comentarios positivos lo mismo! Quizás si decimos «oye, has perdido 5 kilos, qué guapa estás» y esa persona tiene un TCA, se sentirá mejor, y creerá que todo su sufrimiento y lo que está haciendo (vomitar, dieta, deporte excesivo) merece la pena, porque los demás así se lo dicen.
En una sociedad obsesionada por la imagen, fomentemos el cuidado de la salud, no sólo física, sino también mental. Aprendamos a hacer comentarios positivos que vayan más allá del físico.
Y los comentarios negativos… ¡te los puedes ahorrar!